Artículo de Alex Nogués, autor de Carnival of Sins.
Carnival of Sins nació de una provocación. Para ser más exactos, la de la tercera edición del Concurso Provocatio de la Fira Jugar x Jugar de Granollers, que tentaba a los diseñadores de juegos con el siguiente desafío: “hacer un juego con un set de dados de los que se utilizan habitualmente para jugar a D&D”. Tras eso, tan solo quince días por delante para pensar, diseñar, producir un prototipo y generar los contenidos con los que explicar el funcionamiento del juego para su valoración por el jurado. ¿Por dónde empezar? ¿D&D? No… ¿Los siete dados de rol?… Hmmm… Siete… ¿Los siete mares?… ¿Las siete puntas de un heptagrama?… ¿Los siete pecados capitales? ¡Sí! ¡Siete pecados! El tema tomó el control.
En Carnival of Sins deberéis, a lo largo de siete turnos, dejaros llevar por la lujuria, por la gula desenfrenada, envidiar a vuestros vecinos, desatar ataques de ira, abandonaros a la pereza, avariciar hasta enfermar, y nunca olvidar, henchidos de soberbia, que habéis nacido para ser el mayor de los pecadores de Nueva Orleans.
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Siete pecados. Siete dados. Siete cartas. Siete turnos.
Lanzad los dados. Contemplad lo que el azar os deparaba. Escondeos tras vuestra máscara. Escoged el pecado al que os vais a abandonar este turno, sabiendo que la vorágine del carnaval no os permitirá volver a repetirlo. Salid al encuentro de los demás. Capturad los dados, si os dejan, y acumulad puntos. Uno de vosotros será coronado como el rey o la reina del Carnaval.
Un juego para 2 a 5 personas muy pecadoras en el que, en quince minutos, podréis sentir la emoción y el desenfreno del Carnaval y sus excesos.
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Carnival of Sins; quien esté libre de pecado que tire el primer dado.